
Hace catorce meses fue secuestrado el camarada Carlos Lanz Rodríguez por enemigos de la Revolución Bolivariana. Fue una “operación limpia”, como se dice en el argot castrense, realizada por profesionales, pues meticulosamente planificaron y ejecutaron la acción procurando no dejar rastro alguno.
Afirma la Criminalística que no existe crimen perfecto, ni siquiera el de la desaparición forzada que representa el más perfeccionado y cruel de todos los delitos. En este sentido, la aparente ausencia de indicios constituye una evidencia que proporciona pistas acerca de cómo ocurrió el hecho y, fundamentalmente, del perfil criminal de los responsables intelectuales y materiales de éste.
En efecto, la mayoría de los estudios nacionales e internacionales relacionados con este delito de Lesa Humanidad arriba a la conclusión de que sólo organizaciones con cierto grado de desarrollo estructural y orden interno, con significativa disposición de recursos y logística, con suficiente conocimiento de las tecnologías de vigilancia y control electrónico, con manejo de la herramienta de la planificación y con personal capacitado para estas actividades pueden llevar a cabo este tipo de operaciones con relativo éxito.
Ese relativo éxito operacional se acrecienta hasta el extremo de hacerse absoluto, en tanto y cuanto las altas autoridades del Estado no hacen todo cuanto es necesario para asegurar que los órganos de investigación cumplan con la obligación de averiguar a fondo lo sucedido.
El COMITÉ DE BÚSQUEDA Y LIBERACIÓN DE CARLOS LANZ está consciente y no ignora las dificultades que se hacen presentes al momento de indagar sobre este tipo de acción criminal, dadas las precauciones que adoptan los autores en su ejecución.
Sin embargo, en poco o en nada se contribuye a la búsqueda de la verdad si los órganos de investigación demoran la realización de las actividades que implica averiguar diligente y exhaustivamente; paralizan las investigaciones en un punto de su desarrollo; abandonan o no profundizan, sin explicación razonable, el examen de las pistas; excluyen de la investigación, sin justificación alguna, a personas que pueden aportar elementos para esclarecer lo sucedido o que pueden tener responsabilidad en la desaparición; difunden maliciosa y masivamente versiones dirigidas a convencer a la población de que Carlos se sustrajo o esfumó voluntariamente de la vida familiar, política y social que venía llevando hasta el 8 de agosto de 2020; promueven en las instituciones y organizaciones sociales y políticas que se abstengan de hacer comentarios sobre el caso; obstaculizan todo intento o acción de las organizaciones populares y revolucionarias para coadyuvar a desbloquear, profundizar o acelerar las averiguaciones.
En síntesis, hacer que se investiga para no investigar con ánimos de establecer la verdad es el camino típico que escogen quienes buscan encubrir a los perpetradores del delito, por tanto, asumen desgraciadamente el rol de la complicidad.
Compatriota Nicolás Maduro, la experiencia tanto nacional como internacional demuestra fehacientemente que la posición que asuma el Gobierno Nacional es determinante a los fines de resolver satisfactoriamente las desapariciones forzadas.
En este orden de ideas, cabe acotar que en Venezuela hubo algunos avances en las investigaciones sobre los crímenes cometidos por agentes militares y policiales al servicio de los gobiernos de AD y Copei en el marco de la política de Estado que se implementó para contrarrestar la lucha popular y revolucionaria, en virtud de la firme posición asumida por el Comandante Chávez.
Argentina, Uruguay y México, entre otros países, son ejemplos ilustrativos de cómo los gobiernos marcan la diferencia a la hora de investigar con efectividad la violación de los derechos humanos por razones políticas. Insistimos, se puede aparentar que se está investigando para no investigar como corresponde.

Nada se resuelve con hacer un comentario en la televisión sobre el caso de Carlos Lanz, uno que otro día. O que el Fiscal General difunda por las redes sociales sus mensajes de twitter para demostrar que está trabajando, mientras las investigaciones no arrojan resultados. Ese es el punto Señor Presidente. ¿Por qué a 14 meses del secuestro político del que ha sido objeto Carlos Lanz el Ministerio Público y los órganos auxiliares de investigación no han hallado un solo indicio o pista relacionados con el hecho?
La respuesta es muy elemental y sencilla: No existe interés de parte de las altas autoridades del Estado en que se sepa la verdad sobre lo ocurrido con Carlos Lanz, no hay interés en que él aparezca. Sectores con mucho poder dentro del Estado obstaculizan e impiden que la investigación llegue hasta sus últimas consecuencias.
Cómo explicar que en el expediente que cursa en el Ministerio Público no haya una sola acta relacionada con el testimonio del General de División César Mejías Camacaro; que hoy por hoy se desconozca oficialmente si el mencionado general está o no detenido; que no se haya citado a declarar a los militares con los que Carlos trabaja; que tampoco se haya citado a declarar a los socios de la empresa Protokol Grupo de Informática y Telecomunicaciones C.A con quien también él se reunía. En suma, la investigación no se ha desarrollado con la exhaustividad, diligencia, profundidad y celeridad que lo exige la figura delictiva que nos ocupa.
En este sentido, conviene referir que el Comité no ha cesado en denunciar públicamente estas insuficiencias e irregularidades en las que ha incurrido la alta autoridad del Estado que ejerce la función de Fiscal General de la República, compatriota Tarek William Saab. Incluso, advirtiendo tempranamente esta situación se procedió a solicitar ante la Asamblea Nacional que se constituyera una Comisión Especial para examinar el estado y curso de la investigación que sustancia el Ministerio Púbico.
De dicha solicitud no se ha obtenido ningún tipo de respuesta hasta la presente fecha, por cuya razón, cabe la presunción de que otra alta autoridad del Estado, en este caso el presidente de la Asamblea Nacional, compatriota Jorge Rodríguez, la engavetó o le aplicó el silencio administrativo. Como quiera que sea, la actitud de pasividad, silencio y sumisión adoptada por la mayoría de diputadas y diputados frente a la no tramitación de la referida petición pone en cuestionamiento la sinceridad y autenticidad de la condición revolucionaria que dicen tener. No hay excusa que justifique esta indigna y desvergonzada posición. Obvio, hay sus dignas excepciones y la patria, en su momento, se los retribuirá.
A decir verdad, desde el mismo momento en que Carlos Lanz Rodríguez fue secuestrado comenzó a tomar cuerpo la sospecha de que poco o nada haría el Estado venezolano para esclarecer el caso.
Esa sospecha no es un absurdo, ni tampoco se trata de una posición ligera, irresponsable o contrarrevolucionaria. Es, en definitiva, una genuina manifestación de la honda desconfianza que posee el pueblo venezolano sobre el Sistema de Justicia imperante. Las mafias, la impunidad, las arbitrariedades, los privilegios, la corrupción e injusticias siguen siendo los rasgos que lo caracterizan. En síntesis, en materia de justicia judicial, la quinta república no ha sido muy distinta a la cuarta. Es indignante tener que afirmarlo pero es una inocultable verdad.
Pese a esta oprobiosa y antibolivariana situación, el Comité de Búsqueda y Liberación de Carlos Lanz nunca ha renunciado a la esperanza de que la desaparición forzada del camarada Carlos sea resuelta legal y satisfactoriamente. No obstante, también el Comité ha tenido cabal comprensión que ello dependerá, en grado decisivo, de la posición que asuman las altas autoridades del Estado, en el sentido del rol que estén dispuestas a desempeñar en función de derribar todas las trabas, obstáculos, maniobras y resistencias que, días tras día, colocan en el proceso investigativo quienes no están interesados ni les conviene que se sepa la verdad.
Compatriota Nicolás Maduro, usted es el Jefe del Estado, por consiguiente, dispone de amplias facultades constitucionales y legales para implementar los correctivos que se requieren en aras de ponerle fin a esta situación que amenaza con consolidarse y extenderse, habida cuenta de la inactividad investigativa que el Estado ha demostrado en los hechos hasta ahora. Recuerde que la ausencia de persecución y castigo es el ambiente ideal para el fomento y desarrollo de la impunidad.
La Revolución Bolivariana está en la obligación ética, política y jurídica de combatir este flagelo por todos los medios. Por tanto, no puede darle el más mínimo espacio a la posibilidad de que alguien considere que puede consumar este tipo de crímenes y no ser perseguido y castigado.

Compatriota Nicolás Maduro, formal y públicamente le comunicamos que en consideración de lo precedentemente expuesto, el Comité de Búsqueda y Liberación de Carlos Lanz ha ACORDADO:
PRIMERO: Ratificar su indeclinable voluntad de continuar la lucha hasta rescatar sano y salvo al Camarada Carlos Lanz Rodríguez, en tal contexto, combatir todas las maniobras dirigidas a encubrir a los autores intelectuales y materiales de la acción delictiva.
SEGUNDO: Exhortarlo públicamente a implementar todos los correctivos necesarios para que sean subsanadas todas las insuficiencias e irregularidades que presenta la investigación que realiza el Ministerio Público. Por consiguiente, ningún sector social, político, institucional, etc. puede estar excluido de la potestad investigativa que en materia penal le corresponde ejercer al Ministerio Público.
TERCERO: Ejecutar el viernes 8 de octubre de 2021 una ACCIÓN SIMULTÁNEA NACIONAL, consistente en la realización de actividades en todo el país para denunciar la omisión por parte del Estado de investigar exhaustivamente la desaparición forzada del camarada Carlos Lanz. Ese mismo día, a partir de las 6 pm, llevar a cabo un Tuitazo-Protesta con la etiqueta: #PresidenteDóndeEstáCarlosLanz
CUARTO: Continuar con la convocatoria y organización de la MARCHA NACIONAL hacia Miraflores para protestar la actitud cómplice que han adoptado en el caso de Carlos Lanz las principales autoridades estatales. En este sentido, se ratifica los términos del Comunicado emitido por el Comité en fecha 17 de agosto de 2021.
QUINTO: Informar públicamente que el Comité está evaluando la posibilidad de recurrir ante los órganos competentes de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para denunciar las insuficiencias e irregularidades que están presentes en el caso del camarada Carlos Lanz. Constituye una violación a los Derechos Humanos no investigar o aparentar que se investiga los delitos de lesa humanidad.
CARLOS ESTÁ VIVO Y LO VAMOS A RESCATAR
EL AGRAVIO CONTRA CARLOS LANZ NO QUEDARÁ IMPUNE
¡CHÁVEZ VIVE LA LUCHA SIGUE!
Coordinación Nacional del COMITÉ DE BÚSQUEDA Y LIBERACIÓN DE CARLOS LANZ RODRÍGUEZ.
Venezuela, 3 días de octubre del año 2021.
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