
Foro Internacional. “Luchas y resistencias: laboratorio por el socialismo futuro”.
Lausanne, Suiza, 16-17 de mayo 2003
Taller América Latina
Publicamos acá la Ponencia sobre “Situación Venezuela después de un año del Golpe de Estado el 11 A y a 6 meses del Paro Petrolero”, expuesta por el compañero Stalin Pérez Borges*, para ese entonces, trabajador de la empresa Rhodia/Mantex, dirigente del Bloque Sindical Clasista y Democrático (BSCD) y Coordinador Nacional de la Unión Nacional de Trabajadores (UNETE).
Ponencia presentada en Lausanne, Suiza el 17 de mayo del 2003, en el desarrollo del Foro Internacional. “Luchas y resistencias: laboratorio por el socialismo futuro”. Este documento fue publicado por primera vez en aporrea,org, el día 8 de junio 2003, con el título de, “Venezuela: proceso antimperialista y lucha de clase. Y, qué es lo que pasa en Venezuela?”. En esta oportunidad suprimimos algunos párrafos de esa publicación anterior.
En la conmemoración de estos 19 años del golpe de estado del 11 de abril del 2002 (11 A), y pronto también a 8 meses de cumplirse esos mismos años del paro petrolero o lock out patronal, publicamos de nuevo en nuestra página web, al considerar que esta ponencia así como fue un balance de esos históricos acontecimientos, realizado, apenas a un año después de haber ocurrido, también puede servir de balance y reflexiones en estos tiempos difíciles del proceso revolucionario bolivariano. (Nota del Consejo Editor de insisto resisto.org)
In memoria a Ricardo Galíndez, dirigente revolucionario de los trabajadores y de la organización Topo Obrero, fallecido el 20/10/2020.
Antecedentes y aclaratorias.
Aquí algunos compañeros asistentes me han pedido que cuente los detalles de lo que pasó el año pasado en Venezuela y de lo que está pasando ahora. Eso voy hacer. Pero, por el tiempo disponible voy a detallar la coyuntura de manera sucinta. No obstante, recordaré hechos del golpe de abril (11A) y del paro patronal de diciembre 2002/enero 2003 y por allí empezaré.
El golpe del 11 A se dio después que el plan “A” de los golpistas fracasara, el cual era echar a Chávez con las masas, sacándolo de Miraflores el 11 de abril. Posterior a los crímenes de los francos tiradores que perpetró un escuadrón especial de la Policía Metropolitana, la cual la preparó Braton (el exjefe de la Policía de New York que se hizo famoso por el resultado en la lucha contra la delincuencia allá). Este fue contratado por el Alcalde Metropolitano, Alfredo Peña para tal fin, pero terminaron dándole otra uso u orientación.
A partir de esos asesinatos reinó la confusión. Salió el Ministro de Defensa de entonces y actual Ministro del Interior y Justicia a decir que Chávez había renunciado, siendo hecho preso este cuando llegó al Centro de Operación de los golpistas en Fuerte Tiuna. Allí lo deponen y a las pocas horas acuerdan los golpistas de imponer de Presidente de la República, al Presidente de Fedecámaras, Pedro Carmona Estanga.

El 12 en la noche se enardecieron los sectores populares al ver las barbaridades represivas ocurridas y trasmitidas de forma directa por la televisión, y al observarse que en el acto de juramentación de la nueva dictadura estaban los mismos personajes del régimen anterior al de Chávez. Entre ellos, reconocidas caras de la rancia burguesía, a viejos políticos y odiados sindicalistas corruptos. Las masas caraqueñas desde tempranas horas tomaron el Fuerte Tiuna (sede de los batallones militares en la entrada de Caracas) y ya a las 10 de la noche del 12 se había sublevado una base militar de Maracay.

La población espectacularmente salió el 13 a la calle e hizo que Chávez volviera. Este vino con un discurso conciliador y lastimero, restituyendo a los altos ejecutivos de PDVSA que durante el paro petrolero antes del 11A fueron despedidos. A los pocos días puso en los ministerios de la economía a hombres afines a la conciliación y ligados a sectores burgueses. Esta actitud garantizó a la oposición el round de diciembre.
Vinieron con todo en los primeros días de diciembre 2002. Pero, los sectores populares resistieron, entrando en escena esta vez, con mayor fuerza los trabajadores. Se rescató la producción petrolera, se garantizó la producción en las empresas básicas, las cuales controla el estado.
Funcionó la generación y distribución de la energía eléctrica, el servicio de agua, el transporte, el metro de Caracas, la salud y fueron muchos los sindicatos y trabajadores de las empresas privadas que resistieron el paro y algunas, en contra de la decisión de los patronos, pusieron a producir las empresas.
Desde entonces, el proceso de autoorganización se profundizó. El odio se desbordó y se rompió los últimos lazos con la burocracia sindical socialdemócrata de la CTV. Se multiplicaron los círculos bolivarianos, las asambleas populares, surgieron muchos comités por cualquier cosa: los del suministro de gasolina, de gas, de consumo y de tierra.
Los trabajadores petroleros tomaron control de la empresa. Participaron en la selección del personal que ingresaba y hasta provisionalmente de la producción. Esa situación impuso la cogestión en esa empresa y en Cadafe (eléctrica), en donde ahora hay en cada uno estas industrias, dos trabajadores en sus juntas directivas. El trabajo que hacían antes los contratistas (sector tercerizado), ahora lo están asumiendo las cooperativas de trabajadores. Ese es el resumen de abril a enero/febrero de este año. Lo demás lo puedo responder en las preguntas.
Coyuntura hasta mayo 2003.

Justificándose porque con el control de cambio decretado por el gobierno, los empresarios no han tenido acceso a los dólares para comprar en el exterior, materias primas, demás insumos y maquinarias. En estos momentos en Venezuela se está produciendo un gran desabastecimiento de alimentos, productos y equipos. Se están paralizando algunas empresas y comercios, a la vez que se genera una situación de escasez, dimensionándose esta realidad al extremo.
FEDECAMARAS y los otros factores que conviven en la llamada “Coordinadora Democrática” (CD), tienen el mayor interés de que el desabastecimiento y la escacez produzcan un deterioro de la imagen y del respaldado popular del que goza el Presidente Chávez. Por sobre la situación de sabotaje comercial por la falta de los dólares está la inquebrantable decisión de seguir conspirando.
Enfrentaran al gobierno hasta ver que este caiga o acepte las condiciones que estos sectores quieren imponer a través de la Mesa de Negociación y Acuerdo y de los representantes de los llamados Países Amigos. Así juegan al escándalo y a las exageraciones de las informaciones para que haya nerviosismo en la población, sobre todo, en la clase media, produciéndose compras innecesarias (nerviosas), y acaparamientos.
El control de cambio lo decretó el gobierno, cuando producto del paro patronal de los meses de diciembre/02- febrero/03, se produjeron enormes pérdida, las que alcanzaron los 7,5 mil millones de dólares. Se saboteó la industria petrolera que es la que genera el grueso de las divisas. PDVSA tuvo pérdidas materiales y patrimoniales por más de 4 mil millones de dólares. Se produjo también fuga masiva de dólares. Para finales de año 2002 y principios de este año se sobrepasó los 5 mil millones de dólares, llegándose a unos 9 mil millones en todo el año pasado. Bajaron las reservas internacionales a unos 6 mil millones de dólares, cuando anteriormente estaban en los 17 mil millones.
El gobierno queriéndose aprovechar del control de cambio, ha pretendido presionar y disciplinar a su política a los sectores empresariales que necesitan de divisas. Dos meses después de que se eliminó el cambio de dólares libre, el organismo creado para administrar el control de cambio (CADIVI), es que empezó admitir los requisitos para poder comprar los dólares, los cuales van desde poseer las solvencias de los impuestos, los pagos del Seguro Social, Política Habitacional, Paro Forzoso e INCE, así como el detallar el bien que va adquirir y el valor de este.

La realidad según la funcionaria de CADIVI, Adina Bastida, ha sido que la mayoría de los empresarios han presentado solvencias falsas. Dice el Boletín Informativo del IVSS (Notiseguro N° 9), de que el 92% de las empresas privadas mantienen deudas con este ente estatal. Pero, por voces empresariales se sabe que algunos de estos, habiendo cumplido con todo los requisitos, tampoco les han otorgado los dólares.
Llevar el enfrentamiento patronal/CD vs gobierno a este terreno tiene más riesgo, que el que se dio en los meses de enero, febrero y marzo, cuando los patronos hicieron recaer parte de los costos del paro patronal sobre los hombros y sacrificios de los trabajadores. En esa oportunidad las empresas adelantaron vacaciones, laboraban y pagaban sólo 3, 4 y 5 días a la semana (caso que en algunos sitios se mantiene), impusieron rebajas de salarios, eliminaron turnos de trabajo, cerraron empresas. Desde entonces, ha surgido la política patronal de proponer prorrogas de la discusiones en las convenciones colectivas y se despide sin reconocerles todo los derechos de las prestaciones a muchos trabajadores. Como táctica montada por la patronal, tuvo efectos contrarios porque en la mayoría de la población se produjo mayor odio en contra de la patronal.
En estos meses un grueso sector de los trabajadores han respondido a la ofensiva patronal. Se hicieron toma de empresas, la mayoría de los sindicatos no aceptan estas propuestas, recayendo sobre la burocracia cetevista la corresponsabilidad de soportar y alcahuetear tal situación.
Los peligros de ahora están en que, independientemente de que prevalece el peso de la derrota que sufrieron los patronos y la CD en el paro sabotaje de diciembre/enero, en esta oportunidad se está jugando con el hambre en medio de la “pasividad” y la propaganda permanente de la oposición. La desesperación así puede crecer, en medio de que crece el desempleo. Este puede estar ubicado en un 22% y la tendencia es aumentar.
Con un desempleo de 26% se produjo el argentinazo. La preocupación es que uno no ve al gobierno con una política coherente para empezar a resolver tan ingente problema. Los medios de comunicación nacional e internacional arropan al gobierno en la propaganda. Los dirigentes de CD manipulan todo el día con el deterioro del salario, la escasez de productos, en medio de la presión por un acuerdo en la mesa de negociación.
Envuelven crisis económica y la convocatoria a un referéndum revocatorio para realizarse en los próximos meses. James Petras, manifestó recientemente en abril, en el Encuentro Internacional en Caracas, que es una locura el hacer el referéndum en medio de la crisis económica que ellos generaron porque puede pasar lo de Nicaragua.
El gobierno a pesar de que ha desarrollado una incesante ofensiva, con los programas de abastecimiento de alimentos (MERCAL, CASA y otros organismos), buscando garantizar el suministro de los artículos de primera necesidad y provocar bajar los precios de la comida, no ha podido revertir tal situación del alto costo de la vida y de la inseguridad en cuanto a escasez.
Esos mismos programas de distribución de alimento lo controla el sector militar y no hay ellos, una verdadera participación organizativa de las masas.
Sobre la política de generar empleo, seguridad personal el gobierno no presenta alternativa. En ese enorme hueco la oposición pesca con el rompimiento de los sectores populares con Chávez. Eso es lo que hace incierto, si para los próximos meses la mayoría de la población puede seguir respaldando al gobierno. Hasta ahora la mayoría de los sectores populares rechazan las intenciones de los sectores patronales y la CD. Pero, estos siguen jugando duro para darle un vuelco a ese comportamiento de las masas.
Desde la CD, hay grupos que juegan no sólo con la propaganda y presión social, como los que manipulando los medios de comunicación, agitan a los liceístas, a los desempleados, a los exempleados de PDVSA, o a los presidiarios para que estos se revelen y se mantengan en conflictos todos los días sino que juegan a la acción directa y criminal.
Desde los primeros meses del año, viendo que el paro petrolero/saboteo o lock out patronal de diciembre fracasó, ahora aceleran el escenario de un posible conflicto en las fronteras con Colombia, apoyando y alimentando las acciones de las bandas paramilitares. Ya se han producido varios asesinatos. Buscan que se de una política de intervención militar a través del Plan Colombia, una intervención por intermedio de la Carta Interamericana de la OEA o, que se genere un clima de zozobra que perturbe la convivencia para desestabilizar al gobierno.
Los problemas sociales y económicos no resueltos
Las circunstancias políticas que ha soportado el nuevo régimen que desde hace unos 4 años ha estado institucionalizando Chávez (saboteo de la burguesía y el imperialismo, recesión mundial), y las limitaciones de su propio programa, ha hecho que los más irresolubles problemas económicos y sociales que ha vivido por décadas la población venezolana no se revierten, mucho menos se resuelven.
El caso de la Seguridad Social es emblemático. El gobierno supuestamente, está gastando el 4% del PIB. Entre el aporte de los trabajadores y de los “empresarios” en seguros HCM, se aportan cifras que llegan al 3% del PIB, pero la mayoría de los trabajadores no tienen esta cobertura. No es esa la solución.
Sin embargo, el gobierno en estos 4 años no ha implementado la Seguridad Social, ahora han aprobado una Ley Orgánica de SS que luce progresiva, pero, hay que esperar largos meses o años para que se aprueben los subsistemas, calculándose que entre unos 5 o 10 años es cuando se le verían los resultados. Los trabajadores desconocen los alcances de esta Ley, jugando la patronal así a la ignorancia y a la propaganda. Lo que ellos buscan es ponerles las manos a la administración de los fondos de pensiones, los que pueden generar una masa de dinero más alta que la de la renta petrolera.
Aparte de las dificultades producidas por la marcada polarización política, los trabajadores venezolanos tenemos problemas estructurales que no pueden ser modificadas tan sólo con expresiones de buena voluntad e intenciones y/o a la implementación de paños de agua tibia. Eso es lo que se ha hecho hasta ahora. En el marco del capitalismo, así le pongan a este rostro humano, estos problemas empeoraran. Las cifras económicas y sociales vistas en su contexto actual así lo confirman. El cuadro de estas cifras fueron suprimidas en esta publicación ante de descontextualización.

Esas estadísticas (suprimidas) no son nada halagadoras. Y ellas, la ha venido soportado los trabajadores y trabajadoras, sin que sus organizaciones sindicales dieran respuestas. La gran preocupación de la CTV después de haber perdido el control del Banco de los Trabajadores de Venezuela (BTV), era hacer los reclamos y los seguimientos a los aportes económicos y a las otras prebendas que hacía el estado y las organizaciones internacionales para que los principales miembros de su Comité Ejecutivo mantuvieran un estatus de vida a nivel de un alto ejecutivo empresarial.
Bastó que se instalara un gobierno que manifestara no estar dispuesto a continuar contribuyendo en esa situación y que a esta central se le exigiera su democratización, para que la CTV armara un escándalo y se presentara como víctima de una agresión por parte del estado. La mayoría de las centrales de los otros países y las organizaciones sindicales internacionales se han hecho solidarias con la CTV porque de la misma manera, han mantenido idéntica conducta en sus respectivos países.
Esas organizaciones sindicales y la Organización Internacional del Trabajo (OIT), les ha importado poco, la situación económica y social de los trabajadores venezolanos. La casta burocrática de la CTV nunca supo representar a los trabajadores. La mayor prueba es la entrega de la retroactividad de las prestaciones sociales. Nunca pudo defender el derecho al trabajo, por eso también este alto nivel de desempleo. Nunca pudo luchar por un salario digno, por tal motivo esa caída libre desde la década de los 70. Mucho menos, jamás se preocuparon por una seguridad social solidaria e integral.
Mientras la burocracia internacional se queja como perros rabiosos de que a la CTV se le persigue en el país, estos burócratas habían armado un compromiso con la patronal para perpetrar un golpe de estado en abril del 2002, un paro patronal en diciembre de ese mismo año y todavía se mantienen al lado de los empresarios y el imperialismo norteamericano conspirando y saboteando la economía nacional.
La historia del movimiento sindical mundial ha contado pocas veces, con una traición del tamaño y magnitud del que la CTV ha hecho en Venezuela. Es una vergüenza que en esta última reunión del Consejo de Administración de la OIT, realizada entre el 4 y el 28 de marzo de este año, se haya presentado y se apoye el informe 330, hecho por el Comité de Libertad Sindical.
No es posible ni aceptable para cualquier ciudadano demócrata y mucho menos para un dirigente clasista, que la Comisión de Expertos en la Aplicación de Convenios y Recomendaciones de la OIT, llame la atención al Consejo de Administración y diga de que es: “extremadamente grave y urgente la situación en Venezuela, que muestra la continua progresión de quejas acerca de repetidas violaciones de la libertad sindical, tanto de organizaciones de trabajadores como de organizaciones de empleados” (OIT, 22/04/03).
La CTV no es víctima es victimaria. Sólo en este año, compañeros activistas de la organización política que estamos tratando de construir, OIR, han padecido hechos de fragrantes violaciones democráticas y cercenamiento de la libertad sindical. No puedo dejar de aprovechar esta y cualquier otra situación que se presente para denunciar y afirmar con mucha propiedad, de que el mayor agresor en Venezuela de la libertad sindical es la CTV.

Al compañero dirigente sindical y político Ricardo Galíndez, en el estado Lara, casi le quitan la vida con un disparo de pistola a mano de un sicario contratado por parte de unos burócratas sindicales de la CTV, quienes no aceptan la decisión de los trabajadores, de organizarse en un sindicato distinto al de ellos. Y, a la compañera Luz Coromoto Chacón, Secretaria General del Sunep-Sas Carabobo, le tienen un proceso de intervención y persecución, un alto miembro del C.E. de la CTV (Padrón), quien preside el sindicato nacional de esa rama de la administración pública, porque la compañera es clasista, combate sus maniobras burocráticas y enfrenta la política antiobrera de un gobernador miembro de la CD, en donde ese burócrata sindical también participa.

Avanza la conciencia y la organización de los trabajadores
Con la posición de abierta traición a los trabajadores por parte de la CTV durante los sucesos del golpe de estado del 11A y del paro patronal de diciembre/02, los trabajadores terminaron de romper cualquiera remota esperanza de rescatar a esa central. Ese es un ente irrecuperable. Hoy para los trabajadores no significa nada progresivo. Ese sentimiento se vino madurando con el tiempo e hizo implosión ahora en el 2003.
Esa situación es la que da a luz por cesárea a la Unión Nacional de Trabajadores (UNT). Esta irrumpe con una fuerza desmedida. En su acto de constitución se desbordó el local en donde se hizo. El Teatro Nacional de Caracas concentró el 5 de abril más trabajadores afuera que adentro. El 1° de mayo se movilizó alrededor de 500 mil trabajadores (en su mayoría), de distintas partes del país para Caracas.
Mientras la CTV apoyada por la CD y toda la televisión privada logró escasamente hacer una concentración nacional con menos de 10 mil, en su inmensa mayoría clase media, los exempleados de PDVSA, acompañados de todos los dirigentes políticos de todos los partidos de la oposición del todo el país.
La UNT, después de Chávez, es la única organización en Venezuela que puede empujar más allá, hasta adonde ahora está el proceso. Esta central puede o por intermedio de ella, se puede enraizar un poderoso movimiento social, que haga posible que los trabajadores y las masas populares puedan organizarse y conquistar los derechos que estos reclamen.

Ya ustedes vieron la gran franja de trabajadores informales que hay en Venezuela y de los formales, sólo están sindicalizados un poquito más del 20%. Ese reto organizativo y de lucha lo estamos asumiendo, como el desafío de demostrar nuestra independencia del gobierno, como de la patronal y los partidos políticos.
En su dirección (UNETE) hay dirigentes reformistas pero, está un buen núcleo de compañeros que durante años hemos puesto a prueba nuestra consecuencia revolucionaria. Algunos son de la Fuerza Bolivariana de los Trabajadores (FBT), en donde hay compañeros militantes de los partidos del gobierno y dirigentes de organización que no lo son, como nosotros.
Sin embargo, muchos dentro de la UNETE somos socialista e internacionalistas, convencidos de que la “Liberación de los trabajadores será obra de los trabajadores mismos” y de que sólo nuestra acción revolucionaria nos librará de la barbarie capitalista.
Allá somos un laboratorio, del que ustedes dicen en la pancarta de este Foro Internacional: “Luchas y resistencias: laboratorio por el socialismo futuro”

Gracias. Saludos clasistas y revolucionarios.
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